Diario de una Gineco-obstetra: Aligerando mi equipaje
Cuando salimos de nuestra zona de confort, y exploramos otras realidades, nos damos cuenta que la que vivimos, no es necesariamente la única que existe…
Como Gineco-obstetra, durante muchos años, la única realidad que concebí frente al nacimiento, fue la del parto institucional.Cuando salimos de nuestra zona de confort, y exploramos otras realidades, nos damos cuenta que la que vivimos, no es necesariamente la única que existe. Jamás hice totalmente consciente el hecho de que los seres humanos también podemos llegar a este mundo en la profundidad de la selva, en la cima de una montaña, o en la sala de una casa de una convulsionada ciudad.
Mi vocación, es la de asistir nacimientos hospitalarios, porque es allí donde personalmente me siento tranquila, aunque no siempre me sienta cómoda. Pero es mi misión de vida por elección. Agradezco infinitamente las enseñanzas aprendidas durante mi formación académica, porque sin ellas, no sería hoy quien soy. Gracias a ellas, he podido realizar intervenciones médicas durante el parto cuando ha sido necesario, y he podido navegar en las turbulentas aguas de una complicación, cuando ocasionalmente se presenta. Honro a mis maestros, a mis colegas y a mi profesión. Y honro también a todas las mujeres que me han elegido como acompañante en su nacimiento hacia la maternidad. Todas ellas me han marcado un camino. Han sido, y seguirán siendo, mis principales maestras en este transitar, en medio de aciertos y desaciertos.
Tras estas reflexiones hice una pausa en mi camino. Aligeré mi equipaje liberándolo de cargas innecesarias, para con humildad darme el permiso de aprender y desaprender a través de diferentes fuentes. Fue así como Parteras nacionales, Matronas profesionales extranjeras, Doulas, y profesoras de Yoga Prenatal, empezaron a «vaciar mi mochila» de todas aquellas cosas que me pesaban, y la llenaron de sueños y de «antiguos» saberes, que son vigentes hoy , y que además coinciden con las recomendaciones de la evidencia científica actual. El conocimiento es universal. Infinitas gracias a todas ellas, porque tocaron mi alma y mi esencia. Han hecho parte de un camino de transformación que aún no termino de recorrer…
Susy que bonita experiencia, ojalá algún día aprendamos a ver nuevos horizontes . Un abrazo grande
Muchas gracias mi querida Sofie!..te mando un abrazo desde el corazón.